Biberones y obesidad infantil
Un estudio descubrió que el tamaño del biberón con el que está siendo alimentado un bebé puede estar relacionado con su ganancia de peso. En el estudio los pediatras le pidieron a los padres de bebés que sólo eran alimentados con fórmula que les mostraran los biberones que utilizaban. Algunas botellas tenían dos onzas, otras tenían 11 onzas o más.
Después de controlar otros factores que influencian la ganancia de peso, los investigadores encontraron que utilizar una botella más grande cuando el bebé tenía dos meses de edad estaba asociado con un incremento más rápido de peso cuando los bebés cumplían seis meses de edad, en comparación a aquellos que usaban mamilas más pequeñas.
Se sabe que la obesidad infantil es un factor que puede determinar la obesidad en la vida adulta. Utilizar una mamila más pequeña puede ser un paso muy sencillo para ayudar a evitar ganar peso excesivo, señalan en el estudio investigadores de la Escuela de Medicina de Chapell Hill, de la Universidad de Carolina del Norte.
Estudios anteriores ya habían encontrado que biberones más grandes están asociados a un mayor consumo de fórmula, ahora se descubre que mayor consumo de fórmula puede implicar que el bebé gane peso excesivo. Se concluye que los padres que alimentan con mamila a sus bebés deben poner atención a las señales que dan estos, tanto cuando están hambrientos como cuando están satisfechos.
Un bebé que llora no siempre tiene hambre, y uno que aleja su mamila o se distrae cuando está comiendo puede que ya esté satisfecho. No hay que obligarlos a terminarse sus biberones necesariamente.