El paso del tiempo no tiene que ser un proceso de deterioro.  Éste es uno de los principales mensajes del yoga. Tú tienes el poder de elegir mantener un cuerpo y un estilo de vida saludables.  El día de hoy me dirijo a las mujeres en la etapa de la menopausia. En esta etapa de tu vida  se experimenta una baja en el estrógeno y oxitocina (hormona del amor).  Y esto significa que los huesos se pueden volver frágiles y las articulaciones rígidas, duras.  Las posturas de yoga, donde cargas tu propio peso ayudan a mantener tus huesos fuertes y a mejorar la función de tus articulaciones, proporcionándoles un efecto como si las aceitaras.  Y junto con la serenidad mental que genera el yoga,  estas posturas son fundamentales para cualquier etapa de la vida.  Una práctica consistente ayuda a mantener un amplio rango de movilidad y flexibilidad, pero ten en mente, que a medida que tu cuerpo cambia puedes necesitar modificar las poses utilizando props o artículos que te apoyen. Y en este video te muestro unos ejemplos.

• Trikonasana o postura del triángulo.  fortalece piernas, alarga los músculos internos de los muslos alivia síntomas de la menopausia. Sostén por 6 respiraciones completas, cada lado.
• Vrksasana o postura del árbol.  fortalece muslos, pantorrillas, tobillos y espina,  mantiene huesos fuertes y genera confianza a medida que pasa el tiempo. Mantén por 1 minuto.
• Setu Bandha Sarvangasana con uno / dos blocks o postura del puente,  esta versión ayuda a prevenir dolor en la espalda baja, común en esta época de tu vida.  Respira  y sostén por 1 minuto.
• Variación de Baddha konasana con bolster o postura reclinada te ayuda a mantener las articulaciones flexibles y promueve la relajación.  Sentarse en el bolster inclinarse hacia atrás de manera que los hombros queden en el piso y la espalda media y baja y cadera están en el bolster  plantas de los pies juntas y rodillas hacia afuera.  Sostén por 10 – 20 respiraciones.

Muchas mujeres son capaces de mantener muy bien una práctica atlética y dinámica incluso en sus sesentas o setentas.  Por experiencia sé que a cualquier edad puedes transformar la mente, el cuerpo y el corazón.  Y cultivar yoga en tu vida diaria, sintiéndote agradecido.  Puedo decirte con toda honestidad que me siento feliz y bendecida cada día de mi vida.  ¡Namasté!